Mi huella en Meruelo

Caminante, son tus huellas

el camino, y nada más;

caminante, no hay camino:

se hace camino al andar.

Al andar se hace camino,

y al volver la vista atrás

se ve la senda que nunca

se ha de volver a pisar.

Caminante, no hay camino,

  sino estelas en la mar.

 

Hoy ha sido mi último día en el instituto de Meruelo, y este poema de Antonio Machado me sirve para hacer unas reflexiones de despedida. Han sido cuatro años que han pasado muy rápido, con sus momentos malos y muchos buenos. Llegué un día soleado de septiembre (que recuerdo perfectamente) y allí encontré unos buenos compañeros de departamento con los que, he de decir, jamás he tenido ningún problema (y esto es ¡verdad, verdadera! 🙂 ): Jaime, Carlos, Ana, Elvira y Raquel. Todos muy diferentes, pero buenos compañeros. Os echaré de menos fijo.

Con el paso de los cursos, compañeros y compañeras han sido muchos pero solo con algunos compartes momentos y no quiero dejar de recordarles: María Jesús, fuente inagotable de recursos TIC y siempre dispuesta a buscar un rato donde despejar mis dudas Apple; Raquel y Víctor, con los que los cafés pasaban volando; Fernando y Paula, jefes de estudios y siempre dispuestos; Teresa, siempre con una sonrisa y ayudando en lo que se tercie; y ¡qué decir del núcleo duro de la línea 7!, léase el coche (Emilio, Agustín, Blanca, Jaime y Marisa) con los que los viajes diarios se hicieron soportables y donde se han consultado, comentado y resuelto grandes problemas de estado (sí, con minúscula 😉 ). Y en último lugar, pero no menos importante, Marisa que es más que una compañera y con la he compartido (y compartiré) buenísimos momentos fuera y dentro del instituto. Siempre recordaré sus animosas palabras ese primer día en el que las dos aterrizamos en Meruelo. I´ll miss you!!!

Este blog también nació, con pocas pretensiones, hace cuatro años. Muchos alumnos han sido partícipes y colaboradores del mismo y ese era y será mi objetivo. Las últimas entradas han sido de despedidas, pero a partir de ahora comienza una nueva etapa y que algunos ya habréis visto por los cambios que he realizado en el mismo.

Hoy es un día raro, mezcla de nerviosismo, despedidas, tristeza, curiosidad,… Espero que mis huellas no se borren demasiado rápido. ¡GRACIAS por estos años, MERUELO!